jueves, 24 de enero de 2013

LA IGLESIA COMIENDO DE COSAS SACRIFICADAS A LOS ÍDOLOS


Lerma, Miércoles, 23 de Enero de 2013

LA IGLESIA COMIENDO DE COSAS SACRIFICADAS A LOS ÍDOLOS
(APOCALIPSIS 2:12-17)
INTRODUCCIÓN:
En muchos de nosotros hay un profundo deseo de vivir y reflejar nuestra vida como la de Cristo. Deseamos ser cada día como el Señor ¿VERDAD? Muchos de nosotros no estamos conformes de cómo están las iglesias de nuestra región, de nuestra ciudad y la propia. Y más de uno se hace la pregunta: ¿Por qué? Si tenemos todo tipo de buenos recursos Bíblicos. Hoy la Escritura nos contestará exactamente por dónde no queremos encontrar las respuestas a nuestras preguntas anteriores. Y la respuesta contundente es: Somos iglesias y una iglesia ¡Muy mundana! (apestamos a mundo). ¿Es más difícil ser fiel al Señor bajo algunas circunstancias que otras? ¿Hay cosas que están bien que un cristiano se prive por la búsqueda de otras que pudieran no sentir que están bien? En otras palabras ¿debiéramos dejar que las conciencias de otros sean nuestras guías en algunas circunstancias? Estaremos buscando las respuestas para estas y otras preguntas a medida que estudiemos de (1 Corintios 8 y 10:25-33), y la carta a la iglesia en Pérgamo en (Apocalipsis 2:12-17).

I. “Y ESCRIBE AL ÁNGEL DE LA IGLESIA EN PÉRGAMO....” (V-12)
Pérgamo era una ciudad muy religiosa. En ella había más cultos y templos que en Éfeso. Entre ellos, se adoraba al dios esculapio, deidad de la terapéutica y cuyo símbolo era una serpiente, aborrecido por los cristianos. Pérgamo fue la primera ciudad en Asia que construyó un templo dedicado a la adoración de Augusto César.
Pérgamo había sido el centro de un reino independiente por muchos siglos y finalmente se convirtió en posesión de Roma en el 133 A.C. Los romanos la hicieron la capital de la provincia de Asia. La ciudad era también el cuartel general para la adoración al Emperador. El así llamado “concilio” está localizado aquí. Este era un comité encargado de la religión del estado. Existía para promover y hacer cumplir la adoración del Emperador. Esta ciudad había sido leal al Emperador en todos los asuntos, incluyendo su inflexible persecución de los cristianos. (Revelación 1:16) La espada es simbólica de la Palabra de Dios. La palabra es descrita como una espada de dos filos (Hebreos 4:12), y la espada del Espíritu (Efesios 6:17). Hemos indicado de la espada del Espíritu siendo usada en formas diferentes.

Es a menudo usada para convencer al pueblo de sus pecados (Hechos 2:37-38; 2 Timoteo 4:2). Algunas veces es usada para dividir entre la verdad y el error (Hebreos 4:12-14). Este pasaje enseña que un cristiano maduro debiera ser capaz de hacer dos cosas. Debe ser capaz de enseñar y debe ser capaz de discernir entre la doctrina verdadera y falsa. Esta habilidad viene con el crecimiento en aprovechamiento de uno para usar la espada del Espíritu. Otra cosa que la espada del Espíritu hace es cortar toda unión con la impiedad y la falsa enseñanza.
La obediencia y lealtad de uno a la doctrina de Cristo determina si está en comunión con Dios o no (2 Juan 1:9) “Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo”.
El Señor se identifica como “El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto.” Se identifica con firmeza y penetrante severidad. La espada sugiere la palabra y el Evangelio de Cristo, activa en disciplina en el gobierno de gracia por nuestro Rey Jesús.
La iglesia de Pérgamo había desertado de las filas de Jesucristo nuestro Señor y se había sometido al control de la autoridad terrenal. La iglesia de Pérgamo estaba digamos: “En bigamia espiritual”. Cuando la iglesia no usa la espada del Espíritu (la Palabra de Dios) en auto-corregirse, entonces Cristo vendrá y la usará por sí mismo en juicio divino contra la iglesia.

II.Yo conozco tus obras, y dónde moras...” (V-13).
Jesús conoce nuestras obras. Podrá ser que cuando usted o yo mismo estemos ante el juicio de Cristo pudiéramos decir: “Hemos hecho muchas obras maravillosas en tu nombre”, y Él responderá, “Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad” (Mateo 7:21-23); EL ESTAR BIEN DEPENDE QUE TENGAMOS MUCHO CUIDADO DE NO SALIRNOS DE LA DOCTRINA DE CRISTO.
Jesús sabía dónde moraban ellos, “...donde está el trono de Satanás...” Debe animarnos saber que el Señor está interesado en nuestras circunstancias. El sabe dónde moramos.

Cuando Samuel fue enviado a ungir a uno de los hijos de Isaí como rey de Israel, vio a Eliab que era aparentemente de gran estatura y de apariencia majestuosa, y dijo, “De cierto delante de Jehová está su ungido”. Pero vino la respuesta: (1 Samuel 16:7) “Samuel: No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón”. Dios conoce los corazones de los hombres. Jehová Dios es el Padre amante que se apiada de Sus hijos. Conoce nuestra estructura, circunstancias, tentaciones (Salmos 103:13-14). Jehová es el Padre paciente en el sufrimiento que desea con ansia el retorno del hijo pródigo de la pocilga del pecado. Cuando ve a su hijo andando a pie por el camino de regreso, corre a encontrarlo y le coloca un manto sobre su cuerpo, un anillo en su mano y zapatos en sus pies. Jehová conoce nuestras circunstancias.

Hay en el cielo uno que ha experimentado la tentación. Ha experimentado tristeza, tribulación, sufrimiento. Todo lo que el hombre tiene que padecer, este lo ha padecido (Hebreos 4:14-15). Aunque no se dio a la tentación, no se sienta en el cielo como uno que no está deseando ser indulgente con nosotros que faltamos.
Pérgamo era la capital del “culto imperial,” y del “concilio” que exigía por fuerza la adoración del Emperador en Asia Menor. Estos santos vivían precisamente en la sombra de este altar para el Emperador. El Señor comprendía que ellos moraban donde estaba la silla de Satanás. Conocía las grandes pruebas que estaban enfrentando.

NOTA:
Hay una doble alabanza en la congregación: (Rev. 2:13).
1) Sostienes con firmeza el nombre de Jehová: “…pero retienes mi nombre…”.
2) no niegas la fe. “…y no as negado mi fe…”. Es decir, no te has retractado de confesar que crees en la Doctrina de Cristo. Los paganos presionaban a los cristianos y los perseguían para que públicamente negaran que creyeran en Cristo. Jesús conoce nuestra fidelidad. ¿Sus circunstancias fueron suficientes para ellos practicaran el pecado? ¡Mil veces no! Las circunstancias exteriores no determinarán la fidelidad de uno hacia Dios estrechamente tanto como la actitud interior (Salmos 119:11). Si una persona está decidida y determinada a perseverar hasta el fin; la estabilidad en nuestras vidas guiadas por la Doctrina de Cristo nos motiva a tener en nuestra vida la gran esperanza que palpita en nuestro pecho, entonces las pruebas y tribulaciones exteriores ventilarán las llamas de esa ardiente pasión por la Doctrina de Cristo (Hechos 5:41).
Estos cristianos retuvieron su nombre. Dios cambió los nombres de varias personas (Abram a Abraham; Sarai a Sara; Jacob a Israel; Simón a Pedro) y todos estos cambios fueron significativos. Jesús tiene un nombre que es por encima de todo nombre (Filipenses 2:9-11). Ni hay salvación en algún otro nombre (Hechos 4:12). Todas las cosas deben ser hechas en Su nombre (Colosenses 3:17). Ser vituperado por el nombre de Cristo es padecer como cristiano. Aquellos en Pérgamo que retenían el nombre de Cristo estaban sufriendo como cristianos. También fueron alabados porque no habían negado su fe. Esta es la “una fe” (Efesios 4:5) que fue “una vez dada a los santos” (Judas 1:3). No habían cedido. No habían comprometido la verdad de Dios.

No habían negado la fe aún (Revelación 2:13) “…En los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros...” Esto es todo lo que sabemos acerca de Antipas, pero cuan maravilloso saber esto. Dio su vida por Cristo. Quizás el gobierno tuvo por objeto hacer un ejemplo de él. ¡Lo tal simplemente hace al fiel más fiel!
Cuando Esteban fue apedreado hasta morir (Hechos 7:55,59), ahí surgió una gran persecución contra la iglesia (Hechos 8:3,4). Después que Jacobo fue decapitado, (Hechos 12:24) “la palabra del Señor crecía y se multiplicaba”. Oramos por la paz, pero quizás lo que necesitamos es persecución. Quizás seremos más espirituales y más dedicados, más diligentes y más serios acerca de nuestra religión si nos cuesta un poco más. Quizás seremos más conscientes de cuán importante es nuestra fe si supiéramos que ser cristiano pudiera costarnos nuestras casas, trabajos, familias y nuestras mismas vidas. Algunos han presentado la pregunta: Si ser cristiano fuera un crimen, ¿habría suficiente evidencia para condenarlo a usted?

III. “Que tienes ahí a los que… la doctrina de Balaam...” (VS 14-15).
El término “Nicolaítas” es el equivalente griego del nombre “Balaam” en el Hebreo. Ambos significan “destructor de personas”. Usted puede leer acerca de Balaam en Números 22-25. El es el ejemplo sobresaliente de uno que enseñó a los otros a pecar. Balaam enseñaba que no era incorrecto comer “comer cosas sacrificadas a los ídolos ni cometer fornicación.” Así que en la iglesia de Pérgamo había creyentes que enseñaban la misma doctrina de Balaam y así afectaban la vida espiritual de la congregación. Pero hablar es común.

Esto me hace recordar muchos que celebran todo y todas y cada una de las celebraciones que el mundo tiene igualmente lo festejan en sus congregaciones diciendo que no tiene nada de malo también tomarse una y hasta seis bebidas porque todo con medida y control no pasa nada y hasta estos “NICOLAITAS” del año 2013, estos que aún vociferan un eslogan, HABLAMOS DONDE LA BIBLIA HABLA Y CALLAMOS DONDE LA BIBLIA CALLA mientras hacen lo que quieren; sea que la Biblia lo autorice o no. Balaam enseñó a los hijos de Israel a participar en fiestas idólatras y a cometer fornicación con las hijas de Moab (Números 31:16; 2 Pedro 2:15). El otro reproche del Señor es la presencia de los Nicolaítas en la congregación de Pérgamo. Como ya hemos mencionado, los nicolaítas desconocemos su origen. Parece entonces que la doctrina de Balaam y la práctica de los nicolaítas se complementaban una a otra en la iglesia de Pérgamo.
La entrada de la mundanalidad en la iglesia amenazaba con tener que enfrentar el juicio de Dios así como lo enfrento Israel en el desierto, y lo mismo está sucediendo en la Iglesia de hoy en día aún cuando leen este pasaje su entendimiento esta embotado; (Santiago 4:4) “¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios”. La iglesia en Pérgamo había fallado en disciplinar a ciertos miembros en medio de ellos que poseían la misma actitud comprometedora. Podemos suponer que eran la minoría a causa de las cosas buenas ya dichas, pero “un poco de levadura leuda toda la masa” el caso de hoy es que ya son la mayoría.
Hay una importante distinción entre comer cosas sacrificadas a los ídolos y cometer fornicación. Ambas estaban implicadas en la adoración idólatra, pero la fornicación es siempre incorrecta. Comiendo comidas sacrificadas a los ídolos no era incorrecto en sí mismo, pero se volvió incorrecta si esta presentaba piedra de tropiezo para otro (Romanos 14:13,15,21; 1 Corintios 8:8-13).

Algunas veces entonces, en algunas circunstancias, debemos dejar que las conciencias de otros sean nuestra guía. Esto no significa que debamos esforzarnos por agradar a todos en cualquier cosa. Tal cosa sería imposible. Algunos cristianos en Pérgamo estaban aparentemente asistiendo a estos festivales paganos. Estaban participando de las comidas ofrecidas a los ídolos y racionalizando que tal cosa no era adoración para ellos porque sabían que los ídolos no eran dioses. Algunos aun se habían implicado a sí mismos en las inmoralidades que caracterizaban las fiestas. Probablemente asistían a banquetes paganos que incluían sacrificios a los ídolos o donde la carne comida había sido dedicada a un dios. Estos banquetes incluían la inmoralidad sexual. Aquí el Señor está reprochando ambos. Aún estar ahí era un mal negocio. Era una tentación para ellos y una mala influencia para los demás. Pero rehusar unirse en esto podría significar que un hombre perdería su trabajo, negocio, o se convirtiera en un desechado.

Hay tensión con la enseñanza del apóstol Pablo acerca de comer carnes sacrificadas a los ídolos. Cuando Pablo escribe en Corintios, parece ser que trata la invitación para comer en casa de un amigo no creyente. Y era muy probable que la carne que comería había sido dedicada a los ídolos por el carnicero, porque está era la costumbre. Juan, en cambio habla de un banquete dedicado en forma abierta a un ídolo. Participar sería adorar públicamente al ídolo.
En (Mateo 24:4-13) Podemos ver en este pasaje que tentaciones similares y aún peores son presentadas a los cristianos hoy día. Uno podría ser tentado a visitar el club nocturno, o el baile, o a estar en silencio sobre ciertas convicciones, para ser popular, o ser promovido. Jesús aborrece esta doctrina. La iglesia, por tanto, debiera aborrecerla también. ¡Atención a la mundanalidad entre nosotros los creyentes! No basta con conocer mucho de la Biblia y doctrina. ¡¡¡También los demonios creen!!!

IV. “Arrepiéntete; pues si no, vendré a ti pronto...” (V. 16).
Sobre el reproche hecho, el Señor exige un arrepentimiento inmediato de parte de la iglesia de Pérgamo. La advertencia es a hacerlo como algo urgente y rápido. Si la iglesia descuidaba el arrepentimiento inmediato se acarrearía el juicio del Señor. Vendré pronto a ti. A esto se refiere a la venida del Señor Jesucristo en su segunda venida.

V. “Al que venciere, daré a comer del maná…” (V. 17).
El maná escondido. Este símbolo está basado en la comida que sustentó a los hijos de Israel en el desierto. Pero puede referirse al hecho de que el creyente puede apropiarse del sustento espiritual a través de la Sana Doctrina De Cristo para tener comunión con el Señor. El maná es una referencia clara al mismo Señor Jesucristo, en (Juan 6:31-35,49). Jesús mismo se declaró ser el verdadero maná. Jesucristo dice: y le daré una piedrecita blanca. La piedrecita blanca a menudo era usada en las cortes de justicia para representar absolución. Es una señal de privilegio. Así que la piedrecita blanca es una figura que se usa para indicar que el cristiano tendrá entrada libre en la gran fiesta de celebración relacionada con la segunda venida de Cristo. Escrito un nombre nuevo, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe. Esto será una muestra de intimidad y afecto tierno para quien lo recibe. Ese nombre es usado por el Señor y es sólo conocido por el creyente en comunión con Jesucristo. Estas cosas el fiel tiene que esperarlas. En la Biblia, el nombre de una persona representa su carácter e identidad. El pecado distorsiona la identidad humana. En Cristo, Dios nos da una nueva identidad. Podemos saber quiénes somos y podemos relacionarnos con Dios solamente en Cristo.

Aunque la iglesia de Pérgamo estaba “casada” con el mundo e implicada en prácticas que desagradaban nuestro Señor Jesucristo, la misericordia de Jehová Dios obra y extiende un llamado al arrepentimiento a toda la congregación (Salmos 86:15) “Mas tú, Señor, Dios misericordioso y clemente, Lento para la ira, y grande en misericordia y verdad”. Si bien es cierto que el Señor se dirige a la iglesia y le advierte del juicio que podía venir sobre ella, no es menos cierto que hay tres hermosas promesas para el vencedor: sustento espiritual por medio de la Sana Doctrina de Cristo, favor especial el arrepentimiento y comunión íntima por la Sangre de nuestro Señor Jesucristo. El mismo llamado que el Señor hizo a la iglesia de Pérgamo, es el mismo que llamado a todas las iglesias cristianas, también es un llamado a todos nosotros en este día. ¡Sí es posible ser cristiano sin ser mundano!

CUANDO EN LA IGLESIA EMPIEZAN A DORMIRSE ES UNA MALA SEÑAL QUE DEBEMOS PONERNOS BIEN ALERTAS PUES LA BIBLIA NOS ADVIERTE DE ACERCA DE SER UNA IGLESIA DORMILONA: (Apocalipsis 3:1-6)

Sardis significa los que escapan o renovación, había sido la prominente ciudad Griega de Asia Menor. Sardis había sido una de las ciudades más grandes en el mundo y la capital de Lidia. Cuando Roma llegó al poder, la ciudad fue nuevamente grande y rica. En el 17 D.C. sufrió un terremoto devastador. Como resultado, Tiberio, el emperador Romano, disminuyó los impuestos de la ciudad por cinco años y contribuyó para el programa de reedificación de la ciudad. Sardis llegó a ser famosa por su riqueza material. A mediados del siglo VI AC y bajo el liderazgo del rey Croeso, Sardis alcanzó su el apogeo de su fama. Sardis, era además, un centro para la adoración de la diosa Cibeles, otro nombre la diosa Artemisa. Dicha diosa estaba asociada con la fertilidad y era invocada por las mujeres a la hora del alumbramiento.
Cuando Juan escribió el libro de revelación, la ciudad se había degenerado. Y veamos pues a una iglesia del Señor, pero dormilona.

I. “El que tiene los siete… y las siete estrellas…Yo conozco tus obras…que tienes nombre…estás muerto” (Apocalipsis 3:1).
Los siete espíritus de Dios. Es una referencia clara al Espíritu Santo. Habla de la capacitación y la vida en el Espíritu y que están a disposición de la iglesia de Sardis, que es un prototipo de la Iglesia actual que está quedándose dormida y pesar de la condición de muerte espiritual lo cual es para nuestro tiempo que vivimos muy urgente despertar de todas esas falsas doctrinas y Buscar la Única Doctrina Valida de Cristo. Las siete estrellas. Los siete mensajeros a las iglesias, pero también habla de que el Señor tiene el control de sobre las siete iglesias y las hace responsables de responder su llamado. Sardis era una iglesia, que su candelero no emitía una luz poderosa al mundo y ahora de verdad hemos olvidado el único propósito de porque Jesús nos saco de las tinieblas a su luz admirable solo para anunciar sus virtudes de otra manera Jesús nos refiere diciendo: Yo conozco tus obras. Esta frase apunta al poderoso conocimiento de la Sana Doctrina de Cristo nuestro Señor. Él tiene un conocimiento absoluto y perfecto de todas las cosas que nos enseña en la sanidad de su Doctrina. Nada ni lo pasado, ni lo presente ni el futuro se esconde de Jesucristo.

Una verdad que constantemente deberá ser recordada es que Jesús conoce las obras de cada iglesia y sigue muy molesto con todos esos cambistas que se han posesionado dentro y afuera de la casa de oración de Jehová Dios. Y también conoce la condición de cada persona que han hecho de su llamado cuando Jesús mismo constituyó: (Efesios 4:11) “Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros,  evangelistas; a otros, pastores y maestros” Y no llamo a titulares si no a servidores y por supuesto a ningún Líder pues Jesús mismo se puso por ejemplo diciendo que no vino a que lo sirvan sino a servir. A menudo tenemos que confiar en los reportes y reputaciones, pero Jesús es capaz de ir más allá de la apariencia y fachada de la reputación a la verdadera persona Jesús va hasta donde está el corazón. La reputación de una iglesia podría ser una cosa y la verdad algo completamente diferente pues el diablo como imitador que es también el llamo e instituyó cinco Líderes, apóstoles; a otros, profetas; a otros,  evangelistas; a otros, pastores y maestros, Jesús dice que por sus frutos los conoceremos.

Jesús conoce las verdaderas obras y las intenciones de cada corazón. Jesucristo nos refiere también diciendo: “Que tienes nombre de que vives y estás muerto”. Esta frase refleja la situación de la ciudad de Sardis actual. Cuando se escribe el Apocalipsis de Juan, la gloria de la ciudad ya había pasado a la historia. Es probable que los habitantes de la ciudad vivieran manteniendo la gloria pasada sin tomar en cuenta que vivían en una situación diferente, como ahora muchos se dan cuenta que muchas cosas no andan bien pero se conforman diciendo que toman lo bueno y desechan lo malo y de esta manera siguen en el camino de la perdición ya que si de verdad estuviera Jesucristo es sus congregaciones desde el más chico al más grande sin acepción todos tendrían por lo menos un latigazo de parte de Cristo porque Él sigue siendo el mismo de ayer y el de hoy y por siempre que le molestan los cambistas e idolatra.

Jesucristo en su dedicatoria tiene algo muy duro contra las congregaciones que son el prototipo de Sardis: Sardis tenía una falsa reputación de vida. Un “nombre de que vives” sugiere que habían personas que contemplaban la congregación de Sardis deducían que una iglesia con signos vitales aceptables. Y era como ahora una iglesia que tiene muchas actividades, predicaciones, programas y conferencias, pero en lo que concierne a Cristo está más muerta que un cementerio. La iglesia de Sardis como muchas de ahora, sólo viven en apariencias, pero en realidad ante Dios está muerta. En amor al Nombre Santo de Jehová Dios observa si a la congregación donde tú asistes de verdad la fe y las obras van paralelas y llenas de amor y misericordia de otra forma es muy seguro que estés en un lugar donde su padre sea el diablo y es tiempo de que escapes y corras por tu vida. Hubo una iglesia en Sardis, y como la ciudad misma, la iglesia estaba descansando en su reputación pasada lo mismo sucede ya cualquiera dice ser cristiano sin conocer la Sana Doctrina de Cristo y hasta aplican dichos mundanos en lugar de aplicar la Palabra, por ejemplo: ¡Ayúdate que yo te ayudaré!, lo cual Jehová no lo dice. ¡Échale ganas! En lugar de declarar: (Josué 1:9)  Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas”. “Tienes nombre de que vives, y estás muerto.” Aquellos que buscan encontrar una iglesia que los satisfaga y que esté de acuerdo a sus propias concupiscencias en Sardis de los tiempos actuales hay de todo y para todos gustos, si yo que soy un simple servidor tuyo me duele, ¿Cuanto más le dolerá a Jesucristo?

No hay nada más pacífico que un cementerio y no hay iglesia más pacífica que una iglesia muerta donde todos dicen que no pasa nada que todo es exageración del pastor Víctor y de todos aquellos que como yo obedecemos la Sana Doctrina de Cristo. Algunos han observado que cualquier cosa que se mueva las partes genera alguna fricción y la fricción calor. Pero las partes no se están moviendo en este tipo de Iglesias. Jesucristo dice: “Estás muerto.” Para entender lo que esto envuelve, debemos reconocer como las Escrituras usan la palabra “muerte”. Usualmente es usada en sentido literal. La palabra significa “separación.” Cuando un cuerpo retorna al polvo y el espíritu a Dios que lo dio (Eclesiastés 12:7; Santiago 2:26), uno está muerto.

La palabra “muerte” también es usada en sentido figurativo de separación de Dios a causa del pecado (1 Timoteo 5:6; Lucas 15:24). Cuando uno deja la casa de su padre y se va a un país lejano a pecar y gastar su sustento con rameras y en parrandas, está muerto en pecado. Pablo dijo en (Romanos 6:13) que los cristianos fueron vivos de entre los muertos, y en (Efesios 2:1-5) que sus conversos habían estado muertos en delitos y pecados, pero que ahora estaban vivificados o resucitados en Cristo Jesús. Eso había sido verdad de los santos en Sardis también, pero ahora estaban muertos de nuevo. Tuvieron la reputación de estar vivos, de ser una iglesia vibrante. Aún llevaban el nombre de aquel que murió y vive para siempre. Aún tenían sus períodos de reunión conjunta. Aún iban a través de los movimientos de la adoración. Pero estaban muertos.

Hay diferentes cosas que pueden traer la muerte a estas congregaciones: Muchísimas iglesias mueren por causa de las falsas doctrinas que se deslizan. Pablo advirtió de tal cosa a los ancianos de Éfeso (Hechos 20:28-32). Este proceso de muerte es usualmente una prueba lenta permitiendo que las tradiciones entren en las congregaciones y después es fácil que entren en el corazón de sus integrantes. Las falsas doctrinas se deslizan repentinamente. Una pequeña desviación de la Palabra de Dios es introducida, anulando los Santos Juicios de Jehová Dios. Si esta pasa sin ser chequeada, con la Biblia, una desviación adicional de seguro que se encontrará en el camino, del error hasta el grado de estar bien convencidos que donde se encuentran solo ahí se encuentra la única verdad absoluta, CUIDADO tu alma está en PELIGRO.
La iglesia de Sardis del presente podría morir a causa del pecado oculto y de la mundanalidad e inmoralidad. Hay dos grandes problemas: demasiadas iglesias en el mundo y demasiado mundo en la iglesia. Hay demasiadas iglesias con nombres que usted no puede encontrar en la Biblia, con doctrinas que usted no puede encontrar y sustentar en la Biblia, haciendo obras que usted no puede tampoco encontrar en la Biblia. Y siempre ha habido demasiada mundanalidad en la iglesia de Jesucristo nuestro Señor que cuando Jesús vino no le puso nombre pero si se aseguró de enseñar y dejar bien clara su Única Doctrina y todavía rogó al Padre para que nos enviara su Espíritu Santo con el solo propósito de dar evidencia de esta sola Doctrina de Cristo, (2 Juan 1:9) “Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo”. Hay muchos que están débiles y enfermos y muertos a causa de la mundanalidad, carnalidad e inmoralidad en la iglesia como en Corinto también sucedió (1 Corintios 3:3; 5:1-2; 11:30).
La iglesia podría morir a causa de que los miembros se destruyen los unos a los otros con palabras depravadas, envidias y contenciones (Gálatas 5:15). Cualquiera de estas representará una separación del Señor Jesucristo y lo tal constituye una condición de muerte (Juan 15:6,10).

II. “Sé vigilante… afirma… porque no he hallado” (Revelación 3:2).
Sardis cayó ante la invasión de los persas porque la ciudad fue dejada sin guardia. Se creyeron a sí mismos demasiados seguros para necesitar guardia, de manera que cayeron. Ahora, es necesario que la iglesia Sardis del presente se despierte de la muerte que se encuentra que se pueda dar cuenta que fuera de la Doctrina de Cristo están muertos. “Se vigilante,” la idea es por nuestro bien, tenemos que ser vigilantes ante tantas falsas doctrinas. Es una exhortación a que despierten de su anestesia espiritual y continúen vigilando. Este es uno de los principios fundamentales de la Biblia para el cristiano pues se nos manda que escudriñemos las escrituras. A menudo nos es dicho en la Palabra de Dios que velemos (Romanos 13:11-12; 1 Corintios 16:13). ¿Por qué debería velar un cristiano? Debiera velar por los engaños y trucos del diablo (1 Pedro 5:8; Efesios 6:11; 2 Corintios 11:13-15). Muchos basan su esperanza de salvación en cómo se sienten en la congregación donde están, antes que lo que dice la Palabra de Dios.

El cristiano debe también estar alerta contra la tentación, te quiero comentar que lo primero que el diablo te va a robar es la oración, sutilmente ya no orarás por los alimentos, después por tu apuro del trabajo ya no orarás para que Dios te guarde en seguida no tendrás esos momentos que tenías con Jehová Dios en tu intimidad y asi entonces ya serás presa fácil del diablo. Jesús advirtió a Sus discípulos a (Mateo 26:41) “velad y orad, para que no entréis en tentación”. La tentación nos vence cuando permitimos que nuestra guardia se baje. Cuando uno se vuelve demasiado confiado, tendrá mejor que velar (1 Corintios 10:12-13). Otra cosa en la que el cristiano debe velar es por la falsa enseñanza. Pablo dijo a los ancianos en Éfeso que velaran a causa de los lobos... falsos maestros (Hechos 20:31). Nosotros también debemos velar a causa de la falsa doctrina (1 Tesalonicenses 5:21; Hebreos 5:14; 1 Juan 4:1). Como los Bereanos de (Hechos 17:11), debemos escudriñar las Escrituras para ver si es la Doctrina de Cristo y si no es así tenemos que desecharla porque estamos a tiempo de hacerlo y es el único camino que Cristo nos dejo para que caminemos en la sanidad de su Doctrina.
Debemos también velar por la venida del Señor (Mateo 24:42-43). No sabemos el tiempo de nuestra partida y no conocemos el tiempo de Su segunda venida (Mateo 24:36). Debiéramos vivir cada día como si fuera nuestro último día en la tierra. El Señor dijo: “Sé vigilante.” Luego dijo, “Y afirma las otras cosas que están para morir.” Había unas pocas cosas dejadas que estaban vivas. Estaban listas para morir, pero podían ser salvadas si se tomaba una acción rápida. Podría haber sido que su forma de adoración era buena, pero no era en espíritu (Juan 4:24).
Algunas de las religiones de nuestros vecinos tienen lo que ellos llaman la religión del “BUEN SENTIR”. Sin embargo, su religión no es acorde a la verdad establecida por Jehová Dios, por medio de Cristo su Hijo Amado, entonces esto no los beneficia a ellos en nada. Por otro lado, solamente podemos hacer aquellas cosas expuestas en la Sana Doctrina de Cristo que es todo el contexto de la Palabra de Dios, y si no tenemos nuestros corazones en ella, si estamos yendo simplemente a través de las emociones, esto no nos beneficiará en nada.
 “Porque no he hallado tus obras perfectas delante de Dios,” el Señor ha buscado pero no ha hallado las obras de los creyentes de Sardis. Las obras de los creyentes de Sardis estaban faltas de aprobación divina porque, no eran generadas por una fe genuina. Lo que se reprocha no es la cantidad de las obras sino la calidad de la obras de aquella iglesia.

III. “Acuérdate...de lo qué has recibido…oído…guárdalo, y arrepiéntete...” (Apocalipsis 3:3).
Debemos recordar cómo recibimos y oído el Evangelio de Cristo. Aparentemente hubo un tiempo cuando habían experimentado celo y entusiasmo como cristianos jóvenes. Como el Eunuco Etíope, cuando escuchó y respondió al mensaje del evangelio, ellos siguieron gozosos su camino. Necesitamos recordar esa comunión inicial con Cristo. Dios nos ha dado un número de cosas que permanecerán como memoriales para nosotros.
Y las Escrituras nos colocan en remembranza de las cosas que Dios ha hecho por nosotros (2 Timoteo 2:15; 2 Pedro 1:12-13). Cada vez que uno ve que alguien es bautizado en Cristo, eso debe recordarnos la muerte, sepultura y resurrección de Cristo que cada uno de nosotros a confesado (Romanos 6:3-4). La Cena del Señor debiera recordarnos del cuerpo, vida, sangre y muerte del Redentor de la humanidad (1 Corintios 11:24-26). El regalo de la gracia recibido por la fe en Cristo (Romanos 5:8; Efesios 2:8). Cristo dice “guárdalo y arrepiéntete.” Me parece que el arrepentimiento es la cosa más difícil que el hombre debe invocar para hacer. Los creyentes de Sardis tenían la necesidad urgente de arrepentirse de la manera en que habían utilizado la riqueza espiritual que habían recibido del evangelio. No era un mero reconocimiento de que estaban actuando mal, sino llevar a cabo un cambio de rumbo que los acercara a Dios.

ESTUDIO en Lerma por:
Pr. Víctor R. Preciado Balderrama
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viclaly5757.blogspot.com

Buen día les invito con mucho respeto a visitar el BLOGSPOT que Dios me ha regalado y que, con mucho amor he puesto algunos estudios que Dios me ha regalado en revelación, Efesios 3:8.

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